A lo Bjork

Nuestro gran amigo (y antaño jefe de iluminación) no puede creer la belleza del paisaje valletano y en un solo y automático movimiento cae sobre sus espaldas; esto a pesar de que él nació, se crió y habita por esas zonas. Lo cierto es que en su círculo íntimo confiesa que nunca se termina de acostumbrar a todo eso junto y que por eso, de vez en cuando, no resiste y se deja caer, así, simple y sonriente, a lo Bjork.
Ph: Alejandro Gonzalez fotografiado por CORONADO-MON.
1 Comments:
Qué capo que sos Tío! Tu sensibilidad te derriba.
si hasta me acuerdo cuando te dejabas caer montado en tu bici sin cadena... que tiempos aquellos... de fichas y asequias!
Publicar un comentario
<< Home